SEMANA 17

Esta semana reforzamos las dos anteriores de ver y saborear lo bello que nos rodea y te invitamos a cultivar intencionalmente el agradecimiento.

Agradecer es otra de las formas de cultivar la felicidad en nuestra vida. Agradecer las pequeñas cosas en las que nuestro corazón descansa cuando las ve y las saborea nos genera satisfacción y plenitud.

Esta semana te proponemos hacer una tarea muy sencilla pero potente, como lo son las cosas sencillas. Todas las noches cuando estés en cama escribe, o piensa, al menos 3 cosas de tu día por las que te sientes agradecidx. Ya sabes, situaciones, personas, seres, entorno que te rodea,… que se presentan en tu día y te regalan breves momentos que son luz. Si tienes hijxs puedes hacerlo también con ellxs. Es una bonita forma de tomar consciencia de lo que ellxs aprecian realmente.

Percibe cuando pasen. Detente a saborearlos. Da las gracias internamente por ese regalo. Y continúa con lo que estabas haciendo.

PROPUESTA

Al levantarte conecta con la intención de percibir, saborear y agradecer en tu día.

A lo largo de tu jornada lleva tu atención a estas situaciones agradables que aparecen, percíbelas, saboréalas y agradécelas.

Observa el efecto que produce en ti, en tu mente, en tu cuerpo, en tu corazón el conectar con un sentido de gratitud y apreciación.

Al final del día, ya en cama, trae esos momentos de agradecimiento nuevamente, escribiéndolos o trayéndolos mentalmente. Y dedica unos minutos a saborearlos y asimilarlos.

Recuerda: Los pequeños gestos de agradecimiento enriquecen tu vida cotidiana.